Sólo 1 de cada 10 solicitudes de crédito a la primera vivienda son aprobadas
Paul Fernández Periodista
Paul Fernández Periodista
Enrique Arrúa, Director y Tesorero de la Cámara de la Primera Vivienda (Caprivi) dijo que en Paraguay existen dos formas de acceder al financiamiento para la primera vivienda; a través de un crédito con un proceso normal y a través de la Agencia Financiera de Desarrollo.
Sin embargo, indicó que todos convergen en un mismo cuello de botella que es la accesibilidad al crédito por parte de la población.
"Finalmente convergemos en el mismo problema, que es que el cliente no califica para acceder a una línea de crédito en una en una IFI, una institución financiera intermediaria, que pueden ser bancos, financieras y cooperativas, más bancos que otras cosas", dijo.
Comentó que actualmente, y con suerte, existe un 10% de aprobaciones de todas las carpetas con solicitudes de créditos para la vivienda por lo cual sigue existiendo la importante brecha habitacional en el país.
Arrúa aseguró que ellos, desde la Caprivi, con la Cámara Paraguaya de la Construcción (Capaco) y algunas entidades financieras líderes en el país están trabajando en un planteamiento que podría dar un impulso al acceso a los créditos y acortar ese nivel del 90% de rechazos a un 80 o 75% para los próximos años.
Sobre ese punto, mencionó que existe una demanda importante de viviendas, hay tierras para la construcción de las mismas, existen desarrolladoras con interés de invertir, sin embargo, el gran cuello de botella es que el cliente no califica o no llega el monto que tiene que llegar.
Arrúa comentó que, básicamente, están trabajando en el endeudamiento y formalización para los clientes, siendo éstos los ejes principales del planteamiento. Sobre el primer punto, explicó que se trata del nivel de endeudamiento de los posibles clientes que, si bien podría representar importante en términos de cuota, el capital no es alto por lo que se puede buscar una solución.
Señaló que estas deudas generalmente son de corto plazo por lo que se debe trabajar en una alternativa que pueda dar solución y no generar una frustración en los clientes. Por otro lado, mencionó que están las personas que, si bien en el análisis no les permite pagar cierta cuota de un préstamos para la vivienda, en la realidad están pagando un alquiler del mismo monto.
Señaló que esta situación, en muchas ocasiones se da porque los clientes tienen ingresos adicionales que no pueden ser comprobados, restándole competitividad para acceder a los créditos, a pesar de pagar cuotas de alquiler similares o superiores.
En ese sentido, mencionó que plantean que los clientes que estén viviendo en alquileres puedan presentar documentos sobre el pago de las cuotas y que las mismas sirvan de análisis para convertirse en sujeto de crédito.
"Que vos puedas demostrarle a la entidad financiera que vos hace dos años venía pagando religiosamente 2.200.000 de alquiler; entonces, si vos venís pagando religiosamente hace dos años tu alquiler, sin atraso, por supuesto, vas a poder pagar una cuota de un préstamo", añadió.
Explicó que lo que buscan es que los recibos y facturas por pagos de alquiler puedan tenerse en cuenta al momento del análisis de los créditos. No obstante, Arrúa dijo que esta posibilidad depende de una decisión política y un acuerdo público-privado.
Comentó que de no avanzar en la accesibilidad no se podrá llegar a las 4.000 casas por año entendiendo que hasta el año anterior, se llegaban a 3.000. Insistió en que si se solucionan los problemas de accesibilidad, se puede aumentar las aprobaciones en 15% hasta 25%.